Sánchez Dragó dejó una caja fuerte antes de morir con semen y pelos por lo que pudiera pasar

Fernando Sánchez Dragó murió este lunes a los 86 años de edad de una forma repentina en su casa de Castilfrío de la Sierra, en Soria. El escritor se encontraba bien o así lo reflejaban sus redes sociales, en las que publicó contenido antes de fallecer a causa de un infarto.

Un hombre con más de 40 libros publicados, que recorrió mundo y también fue señalado por polémicas sexuales, ha demostrado ser una persona realmente previsora; ya que dejó preparado todo para cuando llegase la hora de su muerte. Desde el ataúd hasta la inscripción que iba en su lápida, son algunos de los detalles que dibujaron parte de la personalidad de este autor que aun se desconocía: una previsión tal a la que a más de uno se le hace difícil enfrentarse.

Las 'últimas palabras' de Sánchez Dragó

Sin embargo, lo que más ha llamado la atención ha sido una caja fuerte que dejó antes de marcharse, donde había guardado varios elementos como pelo, muelas, sudor y semen.

¿Por qué lo hizo?

Según fuentes cercanas al escritor, parece que este lo hizo por miedo a que alguien corrompiera su cadáver. Un hombre que había recorrido medio mundo y conocido a todo tipo de personas, temía que alguien pudiera buscarle para hacerle pruebas de paternidad tras su muerte, como le ocurrió al famoso pintor Salvador Dalí.

Sí es cierto que en algunos de sus escritos Sánchez Dragó ya dejó ver su forma de ser. En uno de ellos llegó a afirmar tenía miedo que a él le ocurriese lo mismo que a Dalí y dejó entrever que existían posibilidades de que tuviera alguna paternidad que él no hubiese reconocido.

Sin embargo, este gesto ha sorprendido no sólo a los que menos conocían al escritor, sino también a sus amigos y familiares cercanos que no se esperaban qué tan calculador podía llegar a ser.